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52.000 emprendedoras y emprendedores desde Iquique a Chiloé tienen servicio microfinanciero integral

23 de abril de 2012
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Durante diez años Fondo Esperanza ha trabajado en microfinanzas, colaborando con la superación de la pobreza, de la desigualdad y entregando oportunidades.

Hace diez años que Fondo Esperanza (FE) tomó vida como la primera institución sin fines de lucro que apoya al emprendimiento de hombres y mujeres en situación de vulnerabilidad. Con este apoyo muchas familias han logrado, con esfuerzo y dedicación, sacar adelante a sus familias.

Actualmente apoya a 52.000 emprendedoras y emprendedores desde Iquique a Chiloé con 35 oficinas en 130 comunas del país. Todo esto, a través de un servicio microfinanciero integral conformado por microcrédito, educación emprendedora y redes. “Nuestro primer gran desafío fue entregar un servicio innovador en el área de las microfinanzas y hasta hoy nuestra metodología ha demostrado ser una fórmula efectiva para que miles de personas surjan junto a sus familias”, cuenta Juan Cristóbal Romero, gerente general de Fondo Esperanza.

Petronila Vega lleva 10 años en Fondo Esperanza. Partió como mesera y cajera en una panadería, pero al tener a su última hija tuvo que empezar a trabajar desde su hogar; imitó los pasos de su marido y decidió ayudarlo en los arreglos florales. El negocio era bueno, pero tan poco el capital que por más esfuerzo que hicieran no podían crecer. Gracias a una amiga conoció a Fondo Esperanza y como dice ella: “fue la mejor oportunidad que pude tener”. Es más, hoy les da trabajo a ocho personas. “Fondo Esperanza es uno de los pilares más importantes de mi vida. Siempre han confiado en mí y en mis habilidades. FE es una ventana que se abre y jamás se cierra”, cuenta Petronila Vega.

A pesar de este enorme camino trazado, aún son miles las familias que están esperando sumarse a esta gran red de apoyo. “Se estima que son más de 600.000 mil los jefes de familias que no cuentan con acceso adecuado para financiar sus emprendimientos, ni con las competencias necesarias para desarrollar sus negocios y apoyar a sus familias. El reto es enorme, y hoy son miles los que se han sumado a este proyecto con el que se busca crecer en un Chile más justo, basado en la solidaridad y en la confianza”, agrega el gerente general de Fondo Esperanza.